Tartar de salmón noruego fresco

No sé por qué no hago con más frecuenta este plato. Es saludable, fácil de realizar, no excesivamente caro y además es nutritivo y poco calórico. Quién da más!


INGREDIENTES
  • 250 Gramos de salmón noruego fresco
  • 1/2 cebolla morada
  • 2 rodajas de pepinillos en vinagre agridulces
  • El zumo de medio limón
  • 1 cucharadita colmada de alcaparras
  • 1 cucharaditae rasa de pimienta verde
  • Unas gotas de tabasco
  • Un chorrito de salsa Lea & perrins
  • Un chorrito de aceite de oliva virgen extra
  • Sal

Tenía  comprada una bandeja de solomillo de salmón noruego fresco sin espinas. Estaba de oferta y me ha resultado comodísimo realizar este plato porque no he tenido que quitarle espinas ninguna porque venía limpio. Si usáis salmón de otras partes tened cuidado a la hora de eliminar las espinas. Ayudaos de unas pinzas de cocina con las que os resultará muy fácil extraerlas.
Otro tema es que el pescado deberá estar previamente congelado para evitar el problema del Anisakis. Una vez sacado del congelador dejadlo en el frigorífico que se descongele despacito, sin forzarlo, el pescado ganará en calidad, en sabor y en textura si no forzamos el descongelado.

Comenzamos? :)
Picamos bien, bien, finita la cebolla morada. Con cebolla blanca también sale bien pero esta morada es mas dulce y pica menos.
Cortamos un poco, no demasiado, las alcaparras. Picamos las rodajas de pepinillos en vinagre agridulces. Por cierto, no me gustan nada los pepinillos que no son agridulces, me parecen demasiado fuertes. Dan un sabor demasiado potente a las preparaciones. Estos son del Lidl y me encantan!!
Vamos incorporando todos estos ingredientes al bol dónde estemos preparando el tartar.

Por último picamos con cuchillo bien afilado el salmón. El tamaño de los trocitos depende del gusto. Yo prefiero que sean de un tamaño mediano. Demasiado picados acaba por deshacerse el pescado y ofrece un aspecto que me desagrada. 

Ahora prepararemos el aliño. Tan fácil como machacar un poco en un mortero una cucharadita colmada de pimienta verde y agregarle las gotas de tabasco, el zumo de limón, el chorrito de aceite de oliva virgen extra, la sal y el par de cucharaditas de salsa Lea & Perrins. Removemos con conjunto y lo incorporamos al bol mezclando bien todos los ingredientes.


Es preferible dejar media hora de reposo para que el pescado se macere. Sé que algunos de vosotros pensaréis que este plato es de pescado "crudo" Pero no es del todo cierto, no está crudo. Está marinado, curado...El zumo de limón, la salsa Lea & Perrins, el vinagre de los pepinillos, el aceite...todos son ingredientes que en esa media hora de reposo "cocinan" el pescado hasta un punto que hace desaparecer la textura y sabor a pescado crudo. Hacedme caso, no tendréis la sensación de tomar pescado sin cocinar. Está simplemente delicado y delicioso!!
Una vez pasado el tiempo de reposo meter la mezcla en un aro de emplatar. Presionar un poco sobre la superficie para que no queden bolsas de aire. Con cuidado retirar el aro hacia arriba.

Podéis servirlo con otro acompañamiento cualquiera. Esta noche nosotros lo hemos tomado con unos berros y tomatitos cherry aderezados con una reducción de Pedro Ximenez. 



Receta de guacamole mejicano

Es imprescindible contar con unos aguacates de muy buena calidad para que esta salsa típica de la cocina mejicana quede en su punto. A mí me gustan más los guacates de la variedad que tienen la piel rugosa, más que los de piel lisa. Encuentro que estos últimos son más insípidos, con más agua y que el guacamole no queda tan "ligado".
Por el contrario, los de piel rugosa son más mantecosos. Aconsejo estos últimos sin duda!!

INGREDIENTES: 
* 1 Tomate grandecito bien maduro (o 2 más pequeños)
* 1/2 cebolla mediana
* 1 manojo de cilantro fresco (20 gramos)
* 1 pimiento jalapeños o un chile (o en su defecto, unas gotas de salsa Tabasco)
* El zumo de medio limón
* Una pizca de pimienta negra recién molida
* Una pizca de sal
* 2 Aguacates bien gordos y maduros
Ayudándonos de una cuchara sacaremos la carne de los aguacate, los trocearemos y los pondremos en el recipiente dónde vayamos a hacer el guacamole reservando los huesos.



A continuación picaremos por separado las hortalizas bien finitas, sobretodo las más duras (la cebolla y el chile o jalapeño) Haremos igual con el cilantro y los tomates.

Incorporaremos todos los ingredientes al recipiente.
Trabajaremos bien el conjunto con un tenedor, aplastándolos bien hasta formar una mezcla en la que aún se aprecien diminutos trocitos de aguacate.  Debe seguir notándose la textura una vez trabajados estos ingredientes.
Rectificaremos de sal, zumo de limón. Si nos gusta con un sabor algo más fuertecitos pues ahora es el momento de agregarle más limón o más picante.
Hasta la hora en que vayamos a servirlo pondremos sobre la salsa los huesos de los aguacates que teníamos reservados. 
Quisiera comentar la importancia que en esta salsa tiene el uso de cilantro fresco. Como casi todas las yerbas aromáticas, frescas no tienen comparación con las que se adquieren comercializadas secas. El aroma del cilantro aporta al guacamole un gusto inconfundible y un aroma exquisito. La cantidad que usaremos, claro, dependerá del gusto personal. A mí me encanta, de ahí que ponga bastante cantidad.
No estoy segura de que el "poder" de los huesos para impedir que la salsa se oxide y ennegrezca sea cierto. Dicen que sí, lo mejor, para mí es hacer esta salsa justo en el momento de tomarla, así evitaremos que se nos ennegrezca. De todas formas ya sabemos que no siempre podemos dejar las preparaciones para el último instante. Así que si tenéis que tenerlo preparado con algo de antelación un sistema para que casi, casi no ennegrezca es cubrir la superficie del guacamole con film de cocina procurando que toda ella esté bien en contacto con el plástico. Al penetrar poco aire se produce poca oxidación
Es típico el servir esta salsa acompañada de tortillas chips tipo "Doritos" aunque a mí, personalmente, me gusta mucho más con rebanaditas de pan bien tierno. Buen provecho, amigos!!

Guisantes frescos con jamón y huevos pochados

Guisantes frescos con jamón y huevos pochados! Sí, son "verdurita" pero madre del amor hermoso... qué nivel de plato!! Rico, nutritivo, fácil. No me digáis que no tiene buena pinta. Venga, anímate a hacerlos! 

Bolitas de chocolate negro con coco, licor y nueces

El chocolate me pierde!! A quién no? Es casi adictivo jejeje Hoy os propongo un dulce que no por fácil deja de ser exquisito. Encontraréis cientos de recetas de tas bolitas en la Red porque son tan socorridas y tan sumamente fáciles de preparar que vale la pena sorprender a nuestros invitados tras una buena comida o simplemente tenerlas en el congelador para cuando queramos "premiarnos" con un delicioso bocado.
Mañana tenemos en el curro nuestra celebración antes de las Fiestas y he querido preparar este pequeño detalle a mis compañeros. A ver si les gustan. Yo creo que sí. Menudos son!!
Buenos, os cuento como las he preparado. Primeros los ingredientes.

INGREDIENTES (Para unas 30 bolitas aprox.)
  • 250 gramos de chocolate de cobertura. He usado el fondant especial postres (mínimo 55 % de cacao) de la marca Hacendado
  • 150 gramos de leche condensada
  • 150 gramos de coco rallado
  • Un chorrito de brandy o de cualquier otro licor que os guste (opcional y que no pondremos si las preparamos para los niños.
  • Un puñado de nueces peladas (También opcional)

En un recipiente que soporte el calor introducimos el chocolate troceado con la leche condensada. Es mejor trocearlo pequeño para facilitar el fundido y que la mezcla esté menos tiempo al fuego. No conviene calentar en exceso el chocolate fundido ya que nos arriesgamos a que nos quede granuloso.
Lo fundimos al Baño María removiendo de vez en cuando hasta que el chocolate se deshaga totalmente. Cuidado al remover porque el chocolate coge mucha temperatura y las salpicaduras pueden ocasionar quemaduras muy, muy desagradables. También os aconsejo que para poder dejar la cuchara dentro uséis una con mango de madera que os permitirá volver a cogerla al remover sin quemaros.




Cuando esté perfectamente fundido añadiremos si nos gusta un chorrito de algún licor. Esto es opcional, quedan también muy ricas sin el licor y por supuesto, no lo incorporaremos si está previsto que las tomen los niños.
Tened en cuenta que al agregar licor, y a pesar de que pudiera pensarse lo contrario, las bolitas quedarán finalmente más duras al enfriarse la pasta.




Yo he puesto brandy pero puede ser cualquier otro. No demasiado, solo para "tunear" un poquillo!! jejeje ;) y removeremos muy bien para que el licor se reparta por igual en todo el chocolate.
Para que la mezcla no endurezca demasiado es mejor poner en una copita el licor que tenemos pensado añadir al chocolate y no incorporarlo de golpe a la mezcla, si no un par de cucharadas, remover, otro par de cucharadas y así hasta terminar con el licor.

Apartaremos del fuego e incorporaremos 100 gramos de coco rallado removiendo muy bien hasta formar una pasta homogénea.






Dejamos enfriar totalmente en el frigorífico bien tapado el recipiente con un plástico. Tener en cuenta que el chocolate es un elemento muy delicado, rápidamente coge cualquier olor de los alimentos que pueda haber en el frigorífico así que llevad cuidado con este aspecto.
Preparamos las cápsulas de papel para bombones que en este caso son tamaño bastante mini porque se trata de un bocado chiquito que pueda tomarse con los dedos.
Y  ponemos a mano un platito con el resto del coco rallado.




El segundo ingrediente optativo son las nueces. A mí me gusta encontrarme junto con el chocolate un trozo de nuez. Creo que nueces y chocolate hacen una pareja estupenda!! Pero si no tenéis, os apetece hacerlas algo más rápidamente o simplemente preferís que no lleve este fruto seco, simplemente formar las bolas sin las nueces dentro. O incluso podéis si os gustan más usar avellanas tostadas o almendras.
Ahora es cuestión de tomar un trozo de pasta del chocolate abundante con una cucharilla y poner encima un trozo de nuez. Tratamos a continuación de "envolver" la nuez con el chocolate en la misma palma de la mano. Una vez "dentro" redondeamos las bolitas haciéndolas rodar entre las dos palmas de las manos para a continuación "rebozarlas" en coco rallado.
No podéis decirme que no es fácil y rápido. Una lástima no poder transmitir a través de aquí el sabor. Simplemente delicioso!!







Porrusalda sencilla en olla rápida

Nada como una rica, suave y deliciosa porrusalda para combatir el frío y que se nos entone el cuerpo.
La suelo hacer con bacalao en salazón pero ni tenía bacalao comprado ni de haberlo tenido tenía previsto hacer este plato esta noche así que no lo hubiera tenido en remojo. Pero además hoy estoy modificando en algo más mi receta clásica, la voy a hacer en olla rápida.
Es algo tarde y hay prisa para cenar de modo que sin bacalao y en olla rápida. Veréis que rica sale hecha así. Un poco menos "lujosa" pero igualmente buena. 


INGREDIENTES:
  • 5 Puerros
  • 1 Cebolla
  • 2 Patatas gorditas
  • 2 Dientes de ajo
  • 2 Rebanaditas de pan
  • Aceite de oliva virgen extra
  • Sal
  • Una cucharadita de hierbas provenzales
  • 2 hojas de laurel
  • Unas bolas de pimienta negra
  • 1 litro de agua

Comenzamos por pelar y lavar escrupulosamente todas las hortalizas, especialmente los puerros ya que fácilmente se quedan pequeños granitos de tierra entre sus hojas. 
A continuación las troceamos: El puerro en rodajitas como de un dedo de gruesas, la cebolla en juliana, la patata cascadas. Los dos dientes de ajo pelados y a trozos gruesos.
Calentamos un buen chorreón de aceite de oliva virgen extra en la olla rápida en el que doraremos los dos dientes de ajo pelados y troceados grandes y las dos rebanaditas de pan. Los apartaremos en un mortero y los reservaremos.
En este mismo aceite echaremos primero la cebolla y el puerro y los rehogaremos durante unos minutos.
Pasados los cuales agregaremos las especias (dos horas de laurel, unas bolitas de pimienta negra y una cucharadita de hierbas provenzales) y la copita de vino blanco. Dejamos que se evapore un poco el alcohol del vino mientras removemos. Incorporamos un litro de agua, removemos y tapamos la olla. A partir de que la válvula se eleve contamos unos 5 minutos de cocción.
Abrimos de olla después de que se despresurice y añadiremos las patatas cascadas para volver a cerrar olla de nuevo y dejar que cueza a partir de subir la válvula otros cinco minutos.
Mientras confeccionaremos el majado con los dos dientes de ajo y las dos rebanadas de pan que tenemos reservados machacando muy bien ambos ingredientes.
Abrimos la olla tras la despresurización y añadiremos el majado. Rectificamos de sal. Dejamos que hierva unos mintutos más el conjunto para que el sabor del majado se incorpore bien a la sopa y no nos queda más que servir!!
Es una preparación amable y reconfortante ideal para noches como estas frías y lluviosas :)